Los municipios de
Cassà de la Selva y
Palafrugell serán la sede de la prueba piloto que la Fundación Instituto Catalán del Corcho inicia este noviembre para
poner a prueba un sistema de recogida de tapones de corcho para reciclar. La actividad forma parte del proyecto de bioeconomía forestal FUTURECORK, que cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.
La prueba piloto se desplegará en una cincuentena de supermercados, hoteles, tiendas especializadas o comercios entre ambos municipios, donde los ciudadanos podrán depositar los tapones utilizados en unos contenedores identificativos. La relación de puntos de recogida se puede consultar en la web de los Ayuntamientos de Palafrugell y Cassà de la Selva o en
www.futurecork.es.
Resultados esperados
Esta acción se prolongará durante un año y tendrá como resultado final un informe técnico y económico que recoja las conclusiones extraídas para implementar con éxito un sistema de gestión integrada de tapones de corcho a nivel estatal.
En cuanto al retorno de la prueba piloto a los municipios, los tapones de corcho que se recuperen servirán para aplicar un pavimento hecho a partir de tapones reciclados en un parque infantil o en los alcorques de los árboles de cada una de las dos localidades.